Los bancos se oponen al Blockchain

Blockchain: porque los bancos y las agencias de calificación se oponen.

por F. Dalle Nogare - Las instituciones de banca central y privada y las agencias de calificación crediticia temen a blockchain más que cualquier otra cosa. Es por eso que están corriendo para cubrirse. El riesgo de boicotear por la comunidad financiera internacional es muy alto.

¿Por qué?

Preguntarse cuál es el papel de los bancos centrales, los institutos de crédito y las agencias de calificación crediticia en general, en un futuro en el que se utilizan blockchains, es como preguntarse qué sucede con los automóviles de gasolina en un mundo de automóviles eléctricos.

Los bitcoins nos han dado una idea de cómo los intermediarios financieros clásicos pueden "saltarse". Si realiza una transacción de bitcoin, no necesita tener una cuenta bancaria. Tienes la cuenta y quédate contigo. ¡Y ni siquiera es más hackeable como una cuenta tradicional, por cierto!

Que los bitcoins sean tuyos no te lo dicen, sino el bitcoin que posees, lo dice, porque se creó con el "consenso" de la comunidad de bitcoin y está certificado por ellos con algoritmos que hacen que su estado sea inmutable.

Por supuesto, estamos hablando de una cadena de bloqueo que no es ni "pública" ni "democrática". Porque los bitcoins se fabrican en solo 4 o 5 lugares en el mundo y tres de ellos están en China.

Pero fue suficiente para crear un sabor de "libertad" financiera.

Ahora imagine que la cadena de bloques no es "privada" o incluso apoyada por una "oligarquía" estrecha de extraños, como la de los bitcoins.

No solo desaparecen los intermediarios financieros clásicos, sino que millones y millones de "nodos", es decir, millones y millones de personas, proporcionarán el "consenso" que certifica los pasos y las transiciones económicas (en la jerga "Distributed Ledger Technology - DLT").

Las transacciones con las que recibo un préstamo de Tizio o vendo la casa en Caio se gestionan en línea y permanecen sin cambios con el tiempo y se "esculpen" en la red. Nada puede ser cancelado o cambiado sin el consentimiento de la "mayoría" de la comunidad de ese blockchain. Y pensar que la mayoría de esos nudos compuestos por millones de personas pueden ser malévolos es pura fantasía.

Esta es la cadena de bloques "democrática": a través de bancos e intermediarios, a través del BCE y de la moneda única, a través de dólares y monedas físicas.

¿Qué queda entonces de los bancos centrales y gobernadores que, como lo vemos estos días, apuntan al gobierno de las democracias occidentales?

Más nada. Cero. Aniquilado.

Preparémonos entonces para boicotear esta nueva tecnología. Los bancos serán los primeros en pretender apoyar su desarrollo, equiparse e identificar, antes que otros, cómo anestesiarlo.

En lógica perfecta, gattopardesca, que forma parte de la clase dominante del régimen financiero actual, tratará de adaptarse a las nuevas tecnologías de blockchain, simulando ser promotor, ser favorable y quizás gastar con palabras de elogio y apreciación.

Y de hecho, aquí está lo que dijo Draghi, después de decir todo lo bueno posible en la cadena de bloques, el 12 de febrero de 2018 como parte de la iniciativa #AskDraghi, en Twitter.

¡Para los dragones el bitcoin "no es una moneda"! ¡Y no es "porque no tiene bancos centrales"!

La declaración de Yves Mersch, miembro de la Junta Ejecutiva del BCE, presentó el discurso en la 22ª Conferencia Anual de Handelsblatt sobre "Bancos y Tecnologías" el 6 de diciembre de 2016: "Se ha hablado mucho sobre el posible impacto del DLT (Block chain ed) sobre los roles y servicios de los bancos centrales. En particular, las preguntas relacionadas con si los bancos centrales deben o no ser un banco central. En consecuencia, creo que es hora de enmarcar la discusión ".

En resumen, ¡los banqueros europeos piensan, gracias a la cadena de bloques, reemplazar el BCE tradicional con un BCE digital! "Si queremos que todo siga como está, todo debe cambiar", afirmó Tancredi, sobrino del Príncipe de Salina.

No entendieron, de hecho lo entendieron muy bien, que el blockchain democrático no tomará prisioneros, ni siquiera los bancos centrales.