Neo V y Sony Ericsson Xperia Arc S este noviembre con Yoigo.
Ya está -Yoigo DESCUENTOS- calentando motores para las próximas fiestas navideñas, para ello lanza el Sony Ericsson Xperia ARc S y Neo V, solamente un mes después de Movistar y Orange, lo acompañán otros modelos como el Xperia Live o el Huawei G7210 por sólo 39 eurilloos, el LG Optimus Hub a 148 euros y el Alcatel One Touch 908 este por 79 euros, estos dos últimos no son de contrato, sino de prepago. El Xperia tiene un grosor de tan sólo 8,7 milímetros, con un procesador mononúcleo a 1.4 Ghz, pantalla de 4.2 pulgadas y una estupenda cámara con sensor retroiluminado de 8.1 megapíxeles y una novedosa función de convertir fotos 2D en fotos a 3D, aparte de las ya habituales aplicaciones y capacidades de los smartphones de alta gama.
Los púgiles políticos Rajoy y Rubalcaba nos ofrecieron en su combate televisivo lo que todos preveíamos. El líder popular llegó al estrado subido a la atalaya de la mayoría absoluta que le pronostican las encuestas, mostrándose templado y sin pretender en ningún momento noquear a su rival, dejando que el encuentro llegara a su fin con un discreto empate a puntos. El aspirante socialista, astuto en sus regates pero sin argumentos y escasas propuestas, intentó golpes bajos con preguntas incisivas que sin embargo daban por hecho que su contrincante será el ganador de la contienda final.
Al final, Rubalcaba se queda donde le sitúan los sondeos, ya que no ha logrado remontar el vuelo ni en el debate ni en lo que va de campaña, a pesar de (o precisamente por) la presencia activa de la vieja guardia representada por González y Guerra. Pesa mucho en la mente de los españoles la nefasta gestión del Gobierno socialista en la última legislatura, en la que Rubalcaba tuvo un notable protagonismo mientras se generaban cinco millones de parados y se hipotecaba el futuro de España a largo plazo. Los ciudadanos de este país no esperábamos que el debate resolviera las elecciones, porque ya sabíamos todos que las va a ganar el PP.
Pero sí esperábamos que los candidatos popular y socialista nos dijeran qué pensaban hacer en caso de vencer. Rubalcaba dijo algunas cosas concretas, y estemos de acuerdo con él o no, nos las dijo. Sabemos a lo que atenernos. El problema es que Rajoy no nos dijo absolutamente nada de lo que quiere hacer, por lo que no puedo estar ni de acuerdo con él ni en desacuerdo. Lo curioso es que ya se le perfile como presidente. Rajoy ha tenido mucha suerte: a la tercera va a ser presidente gracias a que la mayoría del electorado no se hace preguntas del mismo modo que él no las responde.
Los púgiles políticos Rajoy y Rubalcaba nos ofrecieron en su combate televisivo lo que todos preveíamos. El líder popular llegó al estrado subido a la atalaya de la mayoría absoluta que le pronostican las encuestas, mostrándose templado y sin pretender en ningún momento noquear a su rival, dejando que el encuentro llegara a su fin con un discreto empate a puntos. El aspirante socialista, astuto en sus regates pero sin argumentos y escasas propuestas, intentó golpes bajos con preguntas incisivas que sin embargo daban por hecho que su contrincante será el ganador de la contienda final.
Al final, Rubalcaba se queda donde le sitúan los sondeos, ya que no ha logrado remontar el vuelo ni en el debate ni en lo que va de campaña, a pesar de (o precisamente por) la presencia activa de la vieja guardia representada por González y Guerra. Pesa mucho en la mente de los españoles la nefasta gestión del Gobierno socialista en la última legislatura, en la que Rubalcaba tuvo un notable protagonismo mientras se generaban cinco millones de parados y se hipotecaba el futuro de España a largo plazo. Los ciudadanos de este país no esperábamos que el debate resolviera las elecciones, porque ya sabíamos todos que las va a ganar el PP.
Pero sí esperábamos que los candidatos popular y socialista nos dijeran qué pensaban hacer en caso de vencer. Rubalcaba dijo algunas cosas concretas, y estemos de acuerdo con él o no, nos las dijo. Sabemos a lo que atenernos. El problema es que Rajoy no nos dijo absolutamente nada de lo que quiere hacer, por lo que no puedo estar ni de acuerdo con él ni en desacuerdo. Lo curioso es que ya se le perfile como presidente. Rajoy ha tenido mucha suerte: a la tercera va a ser presidente gracias a que la mayoría del electorado no se hace preguntas del mismo modo que él no las responde.
Comentarios
Publicar un comentario