Préstamos online

Si descubre que necesita usar un préstamo de día de pago para pagar un gasto regular y recurrente, debe analizar sus gastos y determinar si hay algo que pueda eliminar en lugar de depender de este tipo de préstamo. También puede usar los préstamos online para cubrir un hogar de emergencia o reparación de automóviles, como reemplazar un horno o un neumático reventado. Una casa sin un horno puede ser peligrosa, especialmente si la temperatura desciende por debajo de los 30 ° F. Mientras tanto, conducir con un neumático dañado no es seguro en ningún momento del año. Estas reparaciones urgentes no se pueden ignorar, incluso si no tiene suficiente en su cuenta bancaria.

¿Para qué deberías usarlo?

Un préstamo de día de pago está destinado a emergencias únicas que no puede cubrir por su cuenta.

Digamos que un aumento en sus tarifas de electricidad significa que recibe una factura más alta de lo que esperaba este invierno. Si esta factura llega al vencimiento en un momento en que no tiene efectivo para cubrir este cargo adicional, puede ser viable utilizar un anticipo en efectivo para ayudar a pagar el gasto.

Si bien puede usarse un préstamo de día de pago para ayudarlo a cubrir una factura inesperada entre períodos de pago, es poco probable que sea una opción asequible si necesita ayuda para pagar sus facturas mensuales regulares.

¿Qué se necesita para un préstamo de día de pago?

Los obstáculos de cualquier préstamo pueden variar de prestamista a prestamista y de estado a estado. Para calificar con MoneyKey, los prestatarios deben:

Ser la edad legal para contactar en su estado de residencia.

Ser ciudadano de los Estados Unidos o residente permanente.

Tener una cuenta bancaria activa.

Tener una fuente de ingresos regular.

Tener un número de contacto válido y una dirección de correo electrónico activa.

¿Cómo funcionan los préstamos a plazos?

Entonces, si se recomienda usar un préstamo a plazos para emergencias únicas similares, podría usar un préstamo de día de pago para cubrir, ¿cuál es la ventaja de usar uno sobre el otro?

En general, un préstamo a plazos se diferencia de un préstamo de día de pago en dos formas principales:

El préstamo a plazos

También puede conocerlo como un préstamo a plazos a corto plazo, un préstamo a plazos de pago flexible o un préstamo de pago flexible en el mismo día.

De hecho, alentamos a nuestros prestatarios a que realicen pagos adicionales de capital, ya que esto puede reducir la cantidad que deberá de intereses y / o comisiones. Si desea realizar pagos adicionales para su préstamo a plazos, llámenos en cualquier momento y uno de nuestros representantes lo ayudará, podrá acceder a uno de los préstamos online de la manera más rápida posible, no importa que esté en ASNEF o que no tenga nómina, basta con tener unos ingresos regulares para acceder a este tipo de créditos rápidos online sin aval.

Cantidad de préstamo: un préstamo a plazos generalmente implica una cantidad de préstamo mayor que la mayoría de los préstamos de día de pago. Varios factores influyen en la cantidad de fondos que puede obtener, incluidas las leyes de préstamos de su estado y sus ingresos mensuales. Para ver lo que puede estar disponible en su estado, consulte nuestra página de Tarifas y Términos para obtener más detalles.

Un préstamo de día de pago puede hacer que flote el dinero que necesita para realizar estas reparaciones inesperadas pero esenciales sin demora. Si una reparación urgente requiere un pago inmediato, le facilitamos la obtención de su préstamo en línea más rápido que nunca para ayudarlo a pagar por problemas de tiempo limitado. Solo tenga en cuenta que, en algunos casos, no es recomendable utilizar un préstamo de día de pago. Es probable que no sea prudente utilizar los fondos de un préstamo de día de pago para una renovación a largo plazo o un trabajo detallado para su automóvil.

¿Qué es un préstamo a plazos?

Un préstamo a plazos es un término general que describe los préstamos personales y comerciales pagados en pagos múltiples. Los préstamos a plazos a largo plazo y los préstamos a plazos a corto plazo se incluyen en este plazo general.

¿Para qué deberías usarlo?

Al igual que un préstamo de día de pago, un préstamo a plazos a corto plazo es ideal para facturas inesperadas o reparaciones esenciales del hogar y automóviles que debe asumir.

Por ejemplo, digamos que se quema accidentalmente mientras cocina, y es lo suficientemente malo como para ir a la clínica. Los médicos allí lo envían al hospital, donde usted recibe tratamiento para una quemadura pequeña pero grave en su mano. Un viaje como este puede terminar costándole mucho dinero, especialmente si no tiene un seguro médico integral.

Un préstamo a plazos puede ayudarlo a pagar estas facturas médicas inesperadas cuando sus ahorros no llegan a cubrirlas. Solo tenga en cuenta que, como préstamo a corto plazo, es poco probable que sea la mejor opción si necesita ayuda con tratamientos o recetas médicas recurrentes.

Plazo de amortización: mientras que un préstamo de día de pago generalmente se vence en su próxima fecha de pago, un préstamo a plazos es reembolsable a través de múltiples pagos programados. Estos pagos suelen coincidir con sus fechas de pago.

Si bien tiene un plazo más largo para pagar su préstamo, no aplicará una multa por pago anticipado si decide cancelar su préstamo a plazos en su totalidad antes de tiempo o realizar pagos adicionales de capital además de sus pagos programados.

Un cheque hecho por 584 euros.

Los préstamos a plazos a largo plazo se denominan así porque generalmente demoran varios años en reembolsarse. A menudo se trata de préstamos personales garantizados que requieren garantías o un cofirmante como forma de garantía. Algunos ejemplos de algunos préstamos a plazos a largo plazo incluyen hipotecas, préstamos estudiantiles o préstamos con garantía hipotecaria.

Los préstamos a corto plazo se pueden pagar en unos pocos meses. Al igual que los adelantos en efectivo del día de pago, este tipo de préstamo a plazos es una alternativa no garantizada con una tasa de porcentaje anual más alta que los préstamos personales garantizados obtenidos a través de los bancos convencionales.